¿Cómo amar a Jess?

V. No se dice adiós se dice Te Amo

“Solamente pido una oportunidad y no la voy a tener, mientras que los celos no permitan  que descubra la realidad. Llevo en las tripas un elevador saltando en el vacio cada vez que te ven besándola…”

-¿Oye y hoy tenias algo que hacer? Pregunte mientras dábamos la vuelta sobre Florencia, -Si tenía que ir a Don Tarimas- dijo mientras sonreía, continuo –Los chicos de Fedex invitaron pero no iré- sonreí, me explico el por qué del nombre y como era el lugar.

El tiempo se fue volando esa noche. ¿Sabes cuanto desearía volver el tiempo a ese día?. Mucho.

En su auto  mi intuición descubrió muchas cosas, cosas de las que mucho tiempo ella después se enteraría.

Se recargo en el respaldo de su asiento y dijo. –Lamento solo ofrecerte esto, verte dos veces al mes- dijo con un dejo de tristeza,  sonreí y pregunte mientras trataba de ordenar mis sentimientos, separar lo correcto de lo incorrecto, lo normal de lo anormal y el amor del desamor y la costumbre. -¿Qué puedo esperar y que no? Digo, no quiero mi respuesta ahora… pero que te parece si la próxima vez que te vea me dices- dije mientras sonreía.

Después te darás cuenta de que Jess es más que olvidadiza lo que le sigue, su memoria de corto plazo solo retiene su nombre y lo que a ella más le importa. 

Consejo No.3. Si nunca recuerda algo, lo más mínimo sobre ti y su relación vas por muy mal camino, algo haces mal.

Baje de su auto cuando abrió la puerta del copiloto, siempre ha sabido ser toda una dama, me despedí de ella con un beso, pedí que avisara que había llegado si podía para no preocuparme de más y enfile hacia la puerta de mi casa.

Ya dentro subí a mi habitación, deje la luz apagada y recostada en mi cuarto mirando el techo y la oscuridad de la noche ya algo entrada repase uno a uno esos besos, sus manos, su sonrisa, sus formas y sus actitudes.

Continuara…

Nota* Esta canción compartirá algunas entradas más en este titulo... pero hoy es la única que he escuchado y quizá sea la menos correcta pero hoy así me siento.

¿Cómo amar a Jess?

Las Reglas

Cuando amas a alguien como ella debes seguir ciertas reglas, muchas veces las descubres justo cuando ya no esta… es aquí donde entra un poco mi ayuda.

Regla No.-1 “Cosas que nunca te dije”

Asegúrate de que ella siempre sepa cuanto la amas. ¿Cómo? Solo hazla feliz, disfruta esa sonrisa, llenala de regalos, le encantan, mata por conseguir y quédate sin una quincena por comprar todo lo que creas que a ella le haga feliz, enséñala a disfrutar de la lectura.

El primer regalo y todos los que le des, muéstraselos poco a poco, alimenta su curiosidad, lo más importante para ella es que la mantengas ocupada pensando en ti, y si no tienes una linda figura puedes conseguirlo siendo la persona mas tierna, invierte gran parte de tu dinero para comprarle esas flores que le encantan, cada que estés con ella aun cuando no se lo digas verbalmente, mírala a los ojos y con tu mirada, acciones y caricias, hazle saber que le perteneces, que lo tuyo es de ella…

Disfruta su sonrisa mientras puedas, tómala de la mano cuando camines a su lado, cuídala, mímala, trátala con cariño, nunca le digas que no a nada y juega con ella, inventa juegos que la mantengan entretenida, has que adivine películas y  canciones ilustrándolos con emoticonos de whats  o de la red social por la que hables con ella.

Demuéstrale que solo respiras por y para ella… así garantizaras que al menos cuando se vaya no se lleve un mal recuerdo de ti.

O igual no me hagas caso, no soy la mejor… Pero has tu intento y disfruta mientras la veas sonreír, de verdad, al igual que tu sé que esa sonrisa no tiene precio y con nada se compara, disfrútala mientras esta contigo aun así  sea mucho o poco tiempo vívelo como si no hubiera mañana para ustedes. Por que cuando ya no este morirás, algo en ti morirá, algo en ti se ira con ella y jamás volverás a ser la misma.

Consejo No.1. Ama los Tulipanes

Consejo No.2. Invitale un buen postre

Continuará... 

¿Cómo amar a Jess?

IV.- El primer beso

La lluvia caía, era la primera vez que me sentía tan especial, no yo, el momento. Me refugie con ella bajo un puesto de periódicos sobre reforma, se acercaba insistentemente a mi, insinuándome lo que debía hacer. prefería no ceder a mis impulsos, quise probarme que tan fuerte era y que tanto podía ella llegar a manejarme de acuerdo a sus movimientos, palabras y actitudes. Era y soy bastante débil si ella lo quiere.

Por momento la lluvia se tornaba muy intermitente. Yo insistía en cambiarnos de lugar constantemente, no podía con el fuego que ardía dentro de mi, ese fuego no propio del deseo carnal, algo quemaba mis entrañas si, y no era nada carnal, era algo mas bien especial. Amor.

Por momentos se acercaba tanto a mi que me robaba el aliento y yo no podía dejar de tartamudear, cosa que es rara en mi solo ella y alguien mas lo habían logrado, sin embargo con ella, siempre sucedía. 

En el segundo o tercer puesto bajo el que nos refugiamos, en la esquina de Genova con reforma, no pude mas, su dominio sobre mi pudo mas que mis fuerzas y la bese, con mis manos tome su cintura y con un pequeño movimiento la acerque lo mas que pude a mi. Ese beso fue por mas el único especial en mi vida, he besado ya muchos muchos labios, mas de los que me gustaría y en ninguno he encontrado esa ternura mezlcada con pasion de manera tan sutil, ese beso me llevo mas allá del cielo, pero como todo esa tarde se vio abruptamente cortado por un hombre que preguntaba cosas... Lo odie. 

A Jessica sabia que la amaría mas que a nada en el mundo, la conocí de tal manera que en cuestión de nada, lo mio lo hice de ella, costo y cuesta trabajo tratar de quitarla de mi mente y corazón, sigue aferrada de tal manera a mi que aun sigo extrañando ese mensaje suyo, es hola que me mataba cuando me contestaba, esa voz... esa voz... 

Tu respuesta es si. Dijo con esa sonrisa que derrumba mi equilibrio.

¿Cómo amar a Jess?

III.- Mi persona favorita

Sus ojos se posaron en mi, sentía ese calor abrazador que durante su estancia nunca desapareció, en sus labios se dibujo una sonrisa y nuevamente con su insistente movimiento de manos pregunto: ¿Quieres tu respuesta ahora? En ese preciso momento se convirtió en mi persona favorita.

El mesero se había equivocado dos enormes veces esa tarde, la primera cuando después de que ella entro le dijo “Ya nos habías espantado, creímos que no vendrías.” En esos momentos lo único que atinaba pedirle a la vida es que temblara y se abriera la tierra justo donde mi silla se encontraba. Comente “Perdón, no era el momento adecuado para que esa pregunta surgiera” la mire por cuestión de segundos y respondió (siempre con esa sonrisa que era tan especial, una mezcla de picara niña y de mujer seductora)  - ¿Por qué no?- 
Cambie apresuradamente el tema. 

Su chocolate acabo y mi expresso había agotado su reserva de vida, pregunto si saldríamos a algún lado o si el plan era estar ahí toda la tarde, sinceramente no quería salir, quería postergar el momento mágico en esa cafetería. Después de buscar un muy largo tiempo mi cartera y sonrojarme ante mi torpeza pague y salimos. 
Caminábamos por la calle de Rio Lerma hacia reforma, platicábamos y mejor dicho yo no paraba de hablar de cualquier tema, ella solo escuchaba, la verdad es que con tanto nerviosismo no recuerdo que dije. Hice una pequeña parada para comprar dulces y un agua única y exclusivamente para tratar de desfogar mi inquietud jugando con ambos,  pasándolo de una mano a otra, girándola y haciendo tantas y tantas cosas. Termino retirando la botella de mis manos.

Al momento de cruzar hacia zona rosa un camión que por poco la salpica con el agua de un charco, mostro sus dotes de habilidad y esquivo el agua. Nos sentamos sobre una banca de reforma, le platicaba el por que y como se miden los kilómetros, sobre el calendario griego y romano. Y la Lluvia comenzó de nuevo. 

Continuara…